CHARLOTTE — El Padre Julio Domínguez, vicario episcopal del Ministerio Hispano de la Diócesis de Charlotte, se encuentra realizando una serie de visitas pastorales a los vicariatos y diferentes movimientos apostólicos con el objetivo de llevar la voz del Obispo Peter Jugis y dar a conocer sus prioridades pastorales, según lo dio a conocer la hermana Juana Pearson, asistente del vicario en el Centro Pastoral de Charlotte.
“Nos encontramos a la mitad del proceso, y aún tenemos pendientes siete visitas, cuatro a vicarías y tres a grupos apostólicos”, dijo la hermana Juana.
“El Padre Julio quiere escuchar las respuestas, interrogantes y propuestas de la gente, de la base, todo ello como primer paso para la formulación del plan pastoral hispano para la diócesis”.
Durante las visitas, y tras exponer los planes de desarrollo, expansión de la evangelización y prioridades pastorales diocesanas, se genera un diálogo abierto con los participantes que exponen sus puntos de vista y las necesidades comunitarias de su región.
La hermana Juana comentó que con gusto ha podido apreciar que la gente no solo piensa en su parroquia en particular sino en toda la diócesis en su conjunto, “en una comunidad viva” que requiere aumentar su tarea evangelizadora y planear las acciones a tomar en un futuro cercano.
Respecto a los participantes, dijo que se invita a las reuniones especialmente a los líderes de los diferentes ministerios, sin dejar de lado a los fieles en general que son bienvenidos a integrarse. “Hemos visto con agrado que también se han acercado sacerdotes y diáconos, y nos da alegría porque motiva mucho a la gente el ver que sus pastores, a sus guías espirituales, están interesados en ellos y quieren lo mejor para el ministerio hispano”, dijo la hermana Juana.
Finalmente, se solicita que las personas escaneen un código QR con sus dispositivos móviles para acceder a una encuesta anónima que deben completar en el momento.
El cuestionario incluye preguntas de opción múltiple y abiertas, donde el feligrés puede explayar sus respuestas respecto a los servicios que esperan recibir de su Iglesia en los próximos años.
Las respuestas son diversas, de acuerdo a los intereses particulares de los movimientos apostólicos y diversos ministerios. Sin embargo, explicó la hermana Juana, se puede ver un interés en generar un cambio en la espiritualidad a través de la solicitud de un mayor número de retiros, asistencia a la familia, la amabilidad en la atención, la evangelización permanente y otros. “Lo importante es que antes que críticas se reciben sugerencias y muchos deseos de cambios positivos”, dijo.
Respecto al uso de QR para las encuestas, la hermana Juana dijo que, “los que piensan que nuestra gente no es capaz de utilizar la tecnología disponible a su servicio están completamente equivocados”, puesto que ha podido ser testigo de primera línea que su uso es muy familiar en jóvenes y adultos.
En referencia a la presencia de los coordinadores del ministerio hispano de los vicariatos en cada una de las reuniones, expresó que estas reuniones “empoderan a los coordinadores”, quienes son personas valiosas delegadas por el obispo para servirlo directamente en la implementación de sus prioridades pastorales y el acompañamiento de los fieles.
La hermana Juana resaltó que, en la Diócesis de Charlotte, se cuenta con coordinadores de ministerio hispano en nómina, con pago, para hacerse cargo de la posición.
“Un caso extraordinario en todo Estados Unidos, y que refleja el especial interés de nuestra diócesis en el pueblo católico hispano, desde las etapas iniciales del ministerio hispano bajo la dirección del anterior obispo, Williams Curlin”.
En la actualidad, se cuenta con diez coordinadores, uno para cada vicaría. De ellos, dos son sacerdotes, cuatro diáconos y cuatro laicos.
Sergio López, coordinador del vicariato de Winston-Salem, dijo que particularmente, además de la transmisión y recepción de información valiosa, la visita pastoral a su vicariato ha servido como respaldo al trabajo de los coordinadores, especialmente laicos, como es en su caso en particular.
A la visita pastoral en esa vicaría, asistieron líderes y feligreses de las parroquias San Benito el Moro en Winston-Salem, Nuestra Señora de la Gracia, Sagrada Familia en Clemmons, Divino Redentor en Boonville, y Holy Angels en Mount Airy.
“Ha sido un despertar del interés de los feligreses”, dijo el Diácono Enedino Aquino, coordinador del ministerio hispano en Greensboro. “A veces nos adormilamos, nos adormecemos, y esta reunión ha sido una Buena ‘sacudida’ para que la gente se involucre nuevamente, conozca de los programas que desarrollan no solo en su parroquia sino a nivel de vicaría, los recursos disponibles y las prioridades de trabajo”, añadió.
Las visitas deben concluir en otoño, para luego dar paso a las etapas de evaluación y formulación del plan pastoral del ministerio hispano de la Diócesis de Charlotte, que regirá las actividades de este ministerio en los próximos años.
— César Hurtado