SALISBURY — Desde hace más de una década, un grupo de más de 30 voluntarios hispanos de la Iglesia Sagrado Corazón de Salisbury lleva adelante la misión de representar ‘La Pasión de Cristo’ en Viernes Santo, que este año se conmemorará el 30 de marzo.
Como refiere Eloy Medrano, director de la representación, la iniciativa nació gracias al apoyo del Padre Julio Rodríguez, que por aquellos años servía como pastor en el Sagrado Corazón. “El Padre nos dejó una guía muy clara, que es la que hasta hoy en día seguimos”, explicó Medrano.
Tras un inicio muy precario, con cascos hechos de cartón y pelotas de goma, la representación ha ido creciendo en realismo gracias a la preparación de los voluntarios y también a su apoyo económico, ya que trajes, armas y gran parte de los artículos que utilizan, son comprados por los mismos actores.
Medrano recuerda con una sonrisa que las túnicas que utilizaban los apóstoles de las primeras representaciones eran “las que se utilizan en las confirmaciones”. Ellos las pintaban y, con unos pequeños arreglos realizados por costureras voluntarias, se lograba simular las túnicas de la época.
TAREA DIFÍCIL
Ensayos regulares después de agotadoras jornadas de trabajo, disciplinado trabajo voluntario de meses, contribuciones económicas, a veces desencuentros y discusiones internas dentro del elenco no hacen nada fácil la tarea de llevar adelante la obra.
Para Alejandro Alva, quien representa a un soldado de Poncio Pilatos, lo más dificil de representar este papel “es que le tengo que pegar a Jesús, quien yo sé viene a salvarme de mis pecados. Eso me llega mucho a mí. El papel, como digo es difícil, pero lo hago por entregarle mi servicio a Dios”, añade.
El mismo Medrano, quien también funge de soldado romano, es “uno de los soldados más malos” y, como afirma, “duele mucho hacerlo, pero hay que actuar para tratar de hacer el papel más real”.
Luis Figueroa, quien participará por tercera vez en la representación, reconoce que hace siete años, la primera vez que vió el montaje de la obra, no pudo resistir el llanto. La gente reacciona ante el castigo a Jesús y, según relata el grupo en su conjunto, han habido testimonios de personas que han intentado ingresar a defender a Jesús.
La dificultad es extrema para Ricardo Aragón, actor que representa a un soldado romano del Templo, quien aprehende a Jesús, le da una bofetada y luego lo presenta ante Pilatos. “Al hermano Rogelio, que hace el papel de Jesús, tengo tiempo de conocerlo y pues no era fácil golpearlo, hasta que él mismo me dijo que lo tenía que hacer. Y bueno, con el permiso de él, ya se me hizo más fácil, pero siempre, aunque haga uno de malo, nos gana el sentimiento y va uno llorando”, afirma.
Miguel Aragón, veterano integrante de la representación desde sus inicios, asegura que el crecimiento ha sido constante, y aunque “muchas veces se batalla en el trabajo y en las prácticas hay controversia, cuando llega el momento de actuar, que en realidad es una misión de evangelizar, todo se transforma”.
En contraste Mario Soto, uno de los dos nuevos integrantes del elenco, afirma nunca haber vivido un Vía Crucis, “que si he visto en México”, pero ahora mismo “que me he estado acercando más a la Iglesia, como que siento más el llamado de servir en algo para la gloria de Nuestro Señor Jesucristo”.
MISIÓN EVANGELIZADORA
La representación se realiza en los exteriores de la iglesia, en un recorrido de alrededor de media milla, y año a año congrega más y más fieles deseosos de vivir la Pasión de Cristo.
Este año, según refiere Medrano, se integrarán entre cuatro a cinco voluntarios anglos, entre ellos uno que desea interpretar el papel de Pilatos, el gobernador de Judea nombrado por el emperador romano Tiberio. “También esperamos al director de la escuela (Sagrado Corazón) que va a representar a un soldado romano”.
Según el grupo, la recompensa no son las palmas ni felicitaciones al concluir la obra. “Cuando termina la representación, nos reunimos y el llanto surge espontáneamente. Nos abrazamos. Es una emocion grande porque nos vemos como hermanos y damos gracias a Dios porque sentimos que la gente que llega a vernos se lleva una enseñanza que les sirve para integrarse más a la comunidad”.
Por ello, el Viernes Santo visite la Iglesia del Sagrado Corazón en Salisbury, 375 Lumen Christi Lane, Salisbury, NC 28147. Llame al 704-633-0591 para confirmar la hora de la representación.
— Cesar Hurtado, Reportero hispano