CHARLOTTE — Del 22 al 27 de enero pasado, el Papa Francisco se reunió con cientos de miles de jóvenes de todo el mundo en la Jornada Mundial de la Juventud 2019 realizada en Panamá. Nuestro pontífice latinoamericano también visitó un albergue de personas con VIH, se refirió a la tragedia del oleoducto en México y la represa en Brasil, así como a la crisis de Venezuela.
Sin embargo, su especial atención fue dirigida a los jóvenes, de quienes dijo “no son el futuro sino el ahora”.
El Papa pidió a los jóvenes no tener miedo, actuar con energía renovadora y confrontar a quienes se empeñan en excluir a los que “no son como nosotros”. Pidió defender la vida y aceptar a la familia y amigos como son. Además hizo un llamado a los obispos centroamericanos a que “roben los jóvenes a la calle y a la cultura de la muerte” y que conduzcan una Iglesia “de salida”, cercana al sufrimiento de su gente.
Peregrinos de Charlotte
Mariana Landa-Chavez y Fernando Villegas, dos jóvenes integrantes del grupo juvenil de la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe de Charlotte, fueron testigos presenciales de la Jornada Mundial de la Juventud, tras ser seleccionados como representantes de la Congregación Vicentina en la Ciudad Reina.
Para Mariana, de 20 años, nacida en Charlotte de padres mexicanos, su selección fue algo muy inesperado. “Desde que me enteré de la jornada me dijo voy a ir pero no sabía cómo”. Le comentaron que había una lista de candidatos pero nunca pensó que la elegirían.
A su compañero de viaje, Fernando Villegas, también de 20 años, le sorprendió la pregunta de si quería acudir al evento mundial juvenil. “Cuando me dijeron que había sido seleccionado y preguntaron si deseaba acudir de inmediato respondí que sí”, dijo.
Ambos viajaron inicialmente a Nueva York, donde se reunieron con un grupo de otros jóvenes provenientes de parroquias Vicentinas en Estados Unidos. Desde allí se trasladaron a Panamá y disfrutaron de un encuentro Vicentino previo a la llegada del Papa. “Tuve la oportunidad de conocer muchos jóvenes Vicentinos de todas partes del mundo. Compartimos tres días en un albergue para huérfanos, luego nos llevaron a una parroquia de la ciudad de Panamá donde nos alojaron en casas de familia”, relató Fernando.
A Mariana le sorprendió la amabilidad de la gente, no sólo de los jóvenes de diferentes países que llegaba a la jornada sino del pueblo panameño “tan amoroso, tan amable y dispuesto a ayudar. Era como estar en casa”.
Ambos tuvieron la oportunidad de estar cerca al Papa Francisco al verlo pasar en el ‘papamóvil’.
“Pese a que todo el ambiente era muy ‘loco’ y el calor muy fuerte, sentí gran paz y alegría al verlo. Decíamos siempre ‘esta es la juventud del Papa’ y nos sentíamos como una gran familia”, contó Mariana.
Los dos se sintieron impactados cuando el Papa “dio la charla sobre que los jóvenes ahora ya no sienten amor o que sienten que ya no existen. Es la verdad y hemos escuchado de los jóvenes que dicen que ya no los quieren, que no importan. Pero en realidad son el presente, el ahora y son muy importantes. El Papa nos reconoció como parte importante de la Iglesia Católica”, apuntó Mariana.
“Somos los jóvenes del Papa y nuestra misión es atraer más jóvenes a la Iglesia, pues no hay muchos”, añadió Fernando, a quien el amor de Dios lo lleva a servir a la comunidad, “a dar parte de mí a la comunidad, a tener una voz activa”.
Relatando su experiencia personal, Mariana dijo que como muchos jóvenes, desde muy niña llegaba a Misa los domingos o sólo para Navidad. “Pero, de repente, mi familia tuvo contacto con la Renovación Carismática, y ahí empecé a tener una conexión con Dios. Más adelante me involucré y ahora es mi pasión trabajar con los jóvenes, ayudarlos en este mundo con tristeza, drogas, violencia, familias disfuncionales y mucho dolor, para darles un mensaje de esperanza y alegría”.
—César Hurtado, Reportero Hispano
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Mariana Landa-Chavez y Fernando Villegas, dos integrantes del grupo juvenil de la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe en Charlotte, formaron parte del equipo de jóvenes que fueron seleccionados de varias parroquias Vicentinas de todo el mundo para participar de la Jornada Mundial de la Juventud que se llevó a cabo en Panamá en enero pasado. “El Papa Francisco nos reconoció (a los jóvenes) como parte importante de la Iglesia Católica”, dijeron. (Foto cortesía Mariana Landa-Chavez)