CHARLOTTE — Más de setecientas personas repletaron las instalaciones de la Iglesia Pentecostal Ministerio Internacional Lirio de los Valles, al oeste de Charlotte, para ser testigos del encuentro entre líderes de organizaciones religiosas y Garry L. McFadden, Sheriff del condado Mecklenburg.
Según indicaron los organizadores, más de trescientos asistentes provenían de la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe, cuyos sacerdotes, Padres Gregorio Gay y Hugo Medellín, forman parte activa en el liderazgo de esta coalición de pastores, líderes latinos del condado y el Congreso de Organizaciones Latinas de Carolina del Norte.
Después del saludo de bienvenida del pastor Mario Guzmán, representante de Lirio de los Valles, tomó la palabra Eduardo Bernal, coordinador del Ministerio Hispano del Vicariato de Charlotte.
Bernal dijo que la decisión de unirse y organizar a la comunidad trata de lograr una voz en los asuntos que impactan a la población hispana. “Somos iglesias y grupos comunitarios representando la diversidad étnica, política y geográfica de nuestra comunidad. Nuestro objetivo es simple, queremos que nuestra comunidad tenga voz en las decisiones que nos afectan. Por eso hemos acordado trabajar juntos en este y otros asuntos en el futuro por el bien de nuestra gente”, subrayó.
Luego Ana Miriam Carpio, directora ejecutiva de UNISAL, organización pro inmigrante de la Ciudad Reina, después de presentar a los representantes de las instituciones participantes, dio paso a Susan Suarez Webster, pastora de la Iglesia Central Metodista Unida, quien señaló que en el pasado, pese a que nuestra comunidad siempre ha estado interesada en trabajar y colaborar con las autoridades, la colaboración del antiguo Sheriff con ICE “generó miedo y desconfianza”.
Luego Suarez Webster propuso que se exploren maneras para fortalecer las relaciones y estrechar los lazos directos entre nuestra red de organizaciones y el nuevo Sheriff, “ya que “todos estamos más seguros cuando hay una relación de confianza y diálogo con las autoridades”. Añadió que, “esta cooperación y la solidaridad de la comunidad entera se hace mucho más necesario y urgente en el contexto de las recientes acciones de ICE en el condado” y denunció que “ha habido amenazas al Sheriff y a las organizaciones comunitarias”.
La pastora manifestó el deseo de la alianza de “comenzar una nueva etapa de convivencia con nuestro nuevo Sheriff” y establecer acuerdos claros de cooperación mutua “en el marco de la realidad de nuestra comunidad Latina”.
Señaló que el apoyo mutuo entre organizaciones comunitarias, la solidaridad de aliados importantes “y una relación clara con el Sheriff del Condado es lo que quisiéramos lograr”.
“Sabemos que el Sheriff se ha dirigido a la comunidad en general por los medios de comunicación, pero nunca con una manera directa como en esta reunión. Nuestro interés es que las relaciones que desarrollemos en esta junta no sean algo momentáneo. Por el contrario, creemos en el desarrollo de una relación a largo plazo por el beneficio de nuestra gente”, puntualizó.
Por su parte el Sheriff McFadden ratificó su compromiso de cancelación del programa 287g y precisó que hay áreas en las que siempre han y seguirán colaborando con ICE, como el compartir datos de huellas dactilares y servir órdenes de detención de criminales autorizadas por un juez.
“Estoy para proteger a todos los residentes del condado de Mecklenburg”, añadió, lo que generó una larga ovación que coreó su nombre.
El Padre Gregorio señaló que la reunión, “gracias a Dios fue un gran éxito” y destacó la presencia otras autoridades locales así como todos los jefes de la oficina del Sheriff.
“Alguna personas se sintieron decepcionadas porque no pudieron hacer preguntas directamente”, dijo, pero “las preguntas y comentarios de la gente se canalizaron para que todos entendieran en su totalidad el contenido de la reunión”.
—César Hurtado, Reportero Hispano