CHARLOTTE — Con el objetivo de ofrecer recursos en español para ayudar a las familias hispanas afectadas por el trastorno del espectro autista (TEA o ASD, por sus siglas en inglés), la Sociedad de Autismo de Carolina del Norte (ASNC) ofreció un taller para educar a padres y profesionales sobre este trastorno en la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe.
“El autismo afecta la capacidad de las personas de comprender lo que ven, escuchan o perciben a través de sus sentidos”, explicó Mariela Maldonado, persona de enlace de asuntos hispanos de la organización sin fines de lucro.
Generalmente, quien sufren de autismo y del Síndrome de Asperger tienen dificultades, más o menos severas, para comprender la comunicación y en el aprendizaje de cómo relacionarse con otras personas, objetos y situaciones.
Mal común
Según informa la Sociedad de Autismo, este mal es el segundo trastorno de desarrollo más común después de la discapacidad intelectual.
Los Centros para la Prevención y Control de Enfermedades en Estados Unidos (CDC), asegura que 1 de cada 59 escolares de ocho años de edad podría ser diagnosticado con autismo en Carolina del Norte.
Otro hallazgo de un estudio publicado por la CDC afirma que cada vez más el porcentaje de TEA entre los niños afroamericanos e hispanos se está aproximando al de los niños de raza blanca.
Ayuda
Durante la exposición, Nancy Nestor, especialista de recursos en autismo, explicó la naturaleza del autismo, los criterios de diagnóstico, niveles del desorden, las habilidades requeridas por las personas afectadas para poder llevar sus vidas, estrategias de comunicación y recursos comunitarios disponibles para las familias.
Maldonado precisó que la ASNC fue fundada en 1970 por padres que buscaban mejorar la vida de sus hijos afectados por el TEA.
“Nuestros servicios y programas se adaptan a las necesidades únicas de las personas con autismo. Les ayudamos a tener vidas saludables, seguras y satisfactorias; apoyamos a las familias a conectarse con los recursos, mantener a sus hijos seguros, resolver problemas escolares y planificación para las necesidades futuras de sus niños; además de educar a la comunidad para que sea sensible, comprenda y aplique el diagnóstico en una edad temprana”, dijo Maldonado.
Grupo de apoyo
Desde más de ocho años, la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe acoge a un grupo de padres que, con el apoyo de la ASNC, se capacitan, comparten experiencias y participan en eventos. “La generosidad de la parroquia es increíble, incluso corren con los gastos de inscripción de algunos participantes a la conferencia que se realiza cada año para que familias, profesionales y defensores del autismo aprendan nuevas estrategias”, indicó Maldonado.
El grupo se reúne el segundo jueves de cada mes, de 9 a 11 de la mañana en la Iglesia Nuestra Señora de Guadalupe, 6212 Tuckaseegee Road, Charlotte. En Greensboro, otro grupo se reúne cada tres meses en la parroquia Santa María.
“Ahora, en febrero de 2020, ofreceremos una charla tanto en inglés como en español en Saint James the Greater Catholic Church en Concord”, informó Maldonado.
Para participar en los Grupos de Apoyo y/o entrenamientos, los padres y voluntarios deben informarse sobre los servicios y programas disponibles en su región.
Llame a Mariela Maldonado, Enlace de Asuntos Hispanos de Autism Society of NC, (919)302-4625 o escriba a This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it..
— César Hurtado, Reportero hispano