WASHINGTON - En un evento en Capitol Hill con los medios el 21 de julio, el cardenal Wilton D. Gregory de Washington se unió a inmigrantes, representantes de agricultura y negocios, y dos senadores estadounidenses para pedir protecciones legislativas que puedan mantener a familias inmigrantes unidas, incluyendo una vía hacia la ciudadanía.
El Cardenal Gregory manifestó que, "como muchos de los miembros de nuestra propia familia que han iniciado una nueva vida aquí . . . nosotros también estamos llamados a demostrar amabilidad y un espíritu de bienvenida a nuestros hermanos y hermanas migrantes y refugiados, quienes están contribuyendo enormemente a nuestra sociedad a través del trabajo y el servicio".
El cardenal les expresó un profundo agradecimiento "por su dedicación y servicio a este país en puestos clasificados como trabajo esencial, asistencial, y militar" durante la pandemia y señaló que el 117º Congreso "ahora tiene la oportunidad de ser valiente al abordar la inmigración de una manera integral y productiva, que brindará el alivio tan deseado para quienes ya viven como estadounidenses".
El cardenal explicó que la doctrina social católica "defiende el principio de que toda persona tiene derecho a vivir en su propia patria, en seguridad y dignidad, con oportunidades de trabajo. Sin embargo, cuando la pérdida de estos derechos obliga a las personas a migrar a otras tierras, debemos acogerlos, protegerlos, y compartir generosamente nuestra abundancia con ellos".
El evento fue organizado por la Coalición de Inmigración Empresarial Estadounidense, que representa a 1,200 directores ejecutivos y empleadores. El grupo patrocinaba una semana de acción nacional centrada en presionar a los miembros del Congreso para que aprobaran el Durbin-Graham Dream Act. El senador Lindsey Graham, republicano por Carolina del Sur, es uno de los patrocinadores de la medida.
Al abrir el evento de prensa, Rebecca Shi, directora ejecutiva de la coalición, dijo que además de la participación de Durbin y Schumer, los miembros se habían reunido con 41 senadores republicanos y que potencialmente de 13 a 15 de ellos podrían apoyar la legislación migratoria.
"Hay un plan para lograr este trato", dijo Shi.
- Catholic News Service