CHARLOTTE — A paso decidido, siempre observando las regulaciones sanitarias dictadas por las autoridades federales, estatales y locales para prevenir el contagio del COVID-19, los retiros y jornadas de reflexión presenciales se reanudan progresivamente en la mayoría de parroquias a lo largo y ancho de la Diócesis de Charlotte.
Pese a que el año 2021 estuvo marcado por una serie de avances y retrocesos en regulaciones de aforo, uso de mascarillas y la aplicación de distanciamiento social, diferentes grupos apostólicos decidieron, con la aprobación de los párrocos de sus iglesias, reanudar sus actividades presenciales dentro del marco regulatorio del código sanitario.
Como se recuerda, en enero pasado algunas iglesias se vieron obligadas a cancelar las celebraciones de Misa presencial, restaurando la emisión de Misas por redes sociales.
En marzo, varias parroquias cedieron sus instalaciones para asistir en el proceso de vacunación de las poblaciones especialmente desatendidas. Por Su parte, la Pastoral de Duelo del Vicariato de Charlotte debió intensificar sus actividades online para ayudar a los muchos fieles que habían sufrido la pérdida de un ser querido por efectos de la pandemia.
Pese a todo, ese mismo mes se realizaron Jornadas Ignacianas presenciales en el Vicariato de Asheville y los miembros de la Pastoral Juvenil recibieron, vía online, el Libro de la Pascua que luego difundieron en sus parroquias durante la Semana Santa.
En junio, tras la reanudación de la obligatoriedad de la asistencia a Misa dominical en la diócesis, una nutrida reunión de retiro de renovación de votos matrimoniales se llevó a cabo en la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe en Charlotte; mientras que para la fiesta de Corpus Christi se pudo observar, en general, un mayor número de asistentes en las celebraciones.
En ese mismo mes, los campamentos vocacionales de verano Quo Vadis y Duc in Altum reunieron a aproximadamente 150 hombres y mujeres, entre 15 y 19 años en retiros de una semana de duración en Belmont Abbey.
En agosto, bajo la guía y conducción de su director espiritual, Diácono Sigfrido della Valle, los Cursillos de Cristiandad realizaron tres retiros, dos de ellos de iniciación y otro más de especialización denominado ‘Retiro de Retiros’.
Entre agosto y septiembre, el movimiento Emaús de las parroquias San Gabriel, San John Neumann y Nuestra Señora de Guadalupe realizó varios encuentros de fines de semana que reunieron a más de 300 participantes en conjunto.
Tristemente, el Congreso Eucarístico, que debía realizarse el 17-18 de septiembre, debió cancelarse. Igual suerte corrió el programado Encuentro de Catequistas, exclusivamente para miembros del Ministerio Hispano, que estaba programado para octubre en la ciudad de Hickory.
Pese a todo, estos últimos meses del año han sido especialmente provechosos. Dos grandes retiros de evangelización se han realizado en el Vicariato de Asheville, la Renovación Carismática recientemente llevó a cabo un retiro en el Centro de Conferencias Católico en Hickory con un lleno total, el Movimiento Apóstoles de la Palabra tuvo un encuentro regional en Nuestra Señora de los Caminos en Thomasville, la Iglesia San Miguel en Gastonia organizó un exitoso Retiro Juvenil, e incontables parroquias desarrollaron Retiros de Adviento con una participación presencial muy importante.
Ante este auspicioso trabajo evangelizador, el Padre Julio Domínguez , Vicario Episcopal del Ministerio Hispano de la Diócesis de Charlotte, expresó su deseo que “esté próximo año que viene todos los movimientos apostólicos comiencen su obra de evangelización a través de los retiros”, por lo que animó a “todos los grupos a organizarse, para llevar a cabo más retiros en este año que entra”.
— César Hurtado, Reportero