CHARLOTTE — La Pastoral de Duelo de la Vicaría de Charlotte inició en enero un nuevo ciclo de acompañamiento a personas que atraviesan por un proceso de duelo debido al fallecimiento de familiares o amigos.
Cecilia Jiménez, coordinadora del grupo de voluntarios, dijo que el grupo dió comienzo a sus actividades el 26 de enero y que concluirán el 30 de este mes.
“Lamentablemente no es posible incluir nuevos participantes porque el acompañamiento es un proceso en el que debemos cumplir etapas y proteger la confidencialidad de las personas que nos confían sus problemas”, dijo Jiménez, detallando que a lo largo de todo este proceso, siguiendo un libro de trabajo, las personas son asistidas por un equipo de voluntarios certificados en este proceso de acompañamiento pastoral, junto con sacerdotes y diáconos.
La coordinadora explicó que el duelo es un proceso normal después de la pérdida de un ser querido. Durante el duelo se atraviesa por diferentes etapas y es muy importante que la persona que lo vive las pueda expresar racionalmente para afrontar el duelo de manera saludable.
La Pastoral de Duelo inició sus actividades en el último semestre de 2019, tras la visita de David Rodas Orozco, psicólogo colombiano que ofreció una capacitación de voluntarios en el Centro Pastoral de la Diócesis de Charlotte. En 2020, los mismos voluntarios recibieron entrenamiento especializado por el
Instituto Pastoral del Sureste (SEPI), para mejorar e implementar nuevos servicios a los que ya se ofrecían en el Vicariato de Charlotte.
Entre el segundo trimestre de 2020 y 2021, la pandemia de COVID-19 agudizó la necesidad de acompañamiento en el duelo de las personas, por lo que se ofrecieron sesiones online que reemplazaron a las reuniones presenciales. En nuestra comunidad se presentaron varios casos de personas que perdieron un gran número de familiares en un corto periodo de tiempo.
“Hasta el momento, el proceso de acompañamiento no se ha detenido”, dijo Jiménez.
NUEVOS ACOMPAÑANTES
Jiménez anunció que en mayo próximo se iniciará el entrenamiento de voluntarios para extender el servicio a otras vicarías de la Diócesis de Charlotte. “El Diácono
Eduardo Bernal, director de la Pastoral de Duelo, ha enviado una convocatoria a las diferentes vicarías para que ellos, como coordinadores, identifiquen a los los candidatos más aparentes dentro de las parroquias para hacer este trabajo, con la intención que las vicarías tengan su propio equipo y se extienda el alcance de forma importante”, dijo la coordinadora.
La Pastoral de Duelo del Vicariato de Charlotte, gracias al entrenamiento profesional recibido, ha elaborado un manual y cuaderno de trabajo que piensa compartir con los nuevos voluntarios en la próxima capacitación que proporcionarán.
“Esperamos un aproximado de 80 personas”, dijo Jiménez, quien es voluntaria de la Pastoral de Duelo por cuatro años.
“Todo este tiempo ha sido para mí ser un instrumento de escucha de quien más sufre, ser una gota en el desierto espiritual y anímico de la persona que sufre la pérdida de un ser querido. Me motiva mucho ver que la persona, cumpliendo un proceso, logra recuperarse y cómo en este camino se encuentra con un Dios que consuela, que los acompaña, que los ama”, anotó.
Si usted siente deseos de convertirse en voluntario de la Pastoral de Duelo, hágale saber su intención a su sacerdote o al coordinador del ministerio hispano de su parroquia. Ellos sabrán estudiar y canalizar su inquietud.
— César Hurtado