El año 2022 ha sido especialmente duro para la profesión periodística en México. Emmanuel Colombié, director de Reporteros Sin Fronteras para Latinoamérica dijo que la lista de periodistas asesinados, 17 en 2022, es “espeluznante”, y denunció que el gobierno federal y los gobiernos locales no se hacen cargo del problema, “ni toman decisiones valientes”.
ARTICLE 19, una organización independiente que defiende los derechos de libertad de expresión y acceso a la información de todas las personas, ha documentado desde el año 2000, 157 asesinatos de periodistas en México, en posible relación con su labor.
La violencia, la intolerancia contra quienes piensan distinto a otros que ejercen el poder, denuncian el crimen organizado, la corrupción o el narcotráfico, por citar solo algunas actividades al margen de la ley, es el pan de cada día en los noticieros de América del Sur, Centroamérica, el Caribe y México.
Pero la intolerancia no es ajena a los llamados países del primer mundo. El 6 de enero de 2021, después de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, en un hecho sin precedentes en la historia norteamericana, seguidores del expresidente Donald Trump asaltaron el Congreso mientras el poder legislativo realizaba un conteo de votos de los colegios electorales y certificaba la victoria del hoy presidente Joe Biden.
La intolerancia está presente en los cinco continentes y en toda actividad humana. Parece ser algo innato en el animal más inteligente del planeta. Cabe preguntarnos entonces, ¿en verdad el género humano representa la mayor inteligencia del planeta Tierra?
Se expresa contra manifestaciones culturales, políticas, raciales, religiosas, de orientación sexual, llegando en algunos casos a generar violencia contra quienes salen fuera de nuestra concepción de “normalidad”.
En el caso de los periodistas, la agresión culmina con el asesinato, con la muerte. En otros, en segregación, intransigencia, falta de empatía, violencia sicológica, expresiones y discursos de odio, discriminación, xenofobia y “etiquetado” de quienes consideramos “seres inferiores” a nosotros.
El Papa Francisco, quien contínuamente nos hace un llamado al compromiso en defensa de la dignidad humana, dijo en diciembre de 2018 que, “en nuestras sociedades contemporáneas existen numerosas contradicciones que nos llevan a preguntarnos si la igual dignidad de todos los seres humanos, proclamada solemnemente hace 70 años, es realmente reconocida, respetada, protegida y promovida en todas las circunstancias”.
Antes, en septiembre del mismo año, con ocasión de la Conferencia Mundial de Xenofobia, Racismo y Nacionalismo Populista realizada en el Vaticano, el Papa subrayó que “en Cristo, la tolerancia se transforma en amor fraternal, ternura y solidaridad operativa. “Ser cristiano”, añadió, “es un llamado a ir a contracorriente, a reconocer, acoger y servir a Cristo mismo descartado en los hermanos”.
Con la sabiduría que lo caracteriza, el Santo Padre fue más allá y en un encuentro de diálogo interreligioso realizado en la Sala Clementina en noviembre de 2019, sentenció que “no hay alternativa: o construimos el futuro juntos o no habrá futuro”.
Así de claro habla el Papa Francisco. “El que tenga oídos para oír, que oiga” (Mateo 13:9).
César Hurtado es gerente de medios hispanos de la Diócesis de Charlotte.